La Selección argentina se vio favorecida con el fixture que le tocará en la primera ronda del Mundial de Sudáfrica 2010, como hacía un par de campeonatos no le ocurría.
En ese sentido, el elenco nacional tendrá en la zona B como rivales a Nigeria, Corea del Sur y Grecia, equipos que no aparecen como demasiado peligrosos, y en caso de terminar como líder recién enfrentará en la final a potencias de la talla de Brasil o España.
De todas formas, si se hace un hipotético cruce de partidos, Italia, defensor del título, Holanda y Dinamarca podrían ser adversarios en semifinales.
Argentina no resultaba beneficiado desde Francia 1998 cuando le había tocado Japón, Jamaica y Croacia, ya que en los torneos siguientes integró dos grupos muy peligrosos, con una temprana despedida en el primero de ellos.
En Corea del Sur-Japón 2002 integró la zona con Nigeria, Inglaterra y Suecia, y se fue en la fase inicial, mientras que en Alemania 2006 le tocó lidiar con Costa de Marfil, Serbia y Montenegro y Holanda. Esa vez llegó hasta los cuartos de final y se fue invicta, tras caer por penales frente al dueño de casa.
Los rivales en Sudáfrica no serán los temibles oponentes que asomaban en el horizonte argentino, porque no cuentan con una importante trayectoria deportiva o atraviesan etapas de recambio que les impide explotar al máximo sus condiciones.
Nigeria no es el mismo que hizo temer a más de una selección en su debut en 1994, ya que mantiene un plantel con un promedio de edad muy alto, clasificó en forma agónica al mundial y su estrella es Obafemi Martins que ni siquiera es titular inamovible.
El segundo adversario será Corea del Sur, un conjunto que no pasó zozobras en las eliminatorias asiáticas, pero que sigue careciendo de roce internacional y, a excepción de su mundial en 2002, jamás pudo pasar la primera instancia.
Y en el cierre de la zona estará Grecia, que en 2004 sorprendió al ganar la Eurocopa con un esquema ultradefensivo que ya es tradicional. Los griegos terminaron segundos en la pasada eliminatoria, en un grupo europeo que no tenía selecciones con peso histórico, y en el repechaje eliminó a Ucrania como visitante.
Por todo esto, el conjunto albiceleste no debería tener problemas en superar como líder la primera fase, aunque ya en la siguiente ronda aparecen los rivales peligrosos, esos a los que hay que ganarle para afianzar el plantel y los que permiten encaminarse como candidato al título.
En octavos de final aparecería el primer adversario fuerte, ya que saldr de la zona A, integrada por Sudáfrica, México, Uruguay y Francia, en una peligrosa zona.
Ya en cuartos de final el panorama se va complicando más en cuanto a rivales de fuste, porque sería Inglaterra o Alemania, dependiendo en qué ubicación terminen en la zona de grupos.
En semifinales, cambiará el rival de acuerdo a su posición en la zona B. Si termina primero evitará nada menos que a Brasil o España y el rival podría ser Italia, Holanda, Dinamarca o Paraguay.
En cambio, si es segundo, no se salvará de enfrentar la pentacampeón mundial o al campeón europeo en la antesala de la gran final.
El camino parece despejado en la fase inicial, pero ya en octavos el panorama se va tornando complejo, aunque si la Argentina puede desplegar todo su potencial tendrá asegurado avanzar una instancia más.
Todo dependerá de poder levantar cabeza y afianzar un equipo que recorrió a los tumbos las eliminatorias sudamericanas y anda buscando su propia identidad.
Fuente: NA