HECHO, AL MENOS, INSÓLITO Y SOSPECHOSO

Un automovilista totalmente alcoholizado protagonizó un incidente en Palermo. Se enojó con efectivos de la Federal y, molesto por el acoso de la prensa, se bajó los pantalones ante la TV. No se ocultó en ningún momento la «indulgencia» de los efectivos policiales que acudieron al lugar, se escuchó que «estamos tratando de sacar todas las filmaciones del lugar», haciendo referencia (seguramente) a las cámaras  que pudieron captar el inicidente. Actuó la Policía Federal, y el auto fue retirado del lugar por la misma fuerza.

La esquina de Honduras y Acuña de Figueroa se convirtió esta mañana en escenario de un escándalo: un hombre de unos 45 años en total estado de ebriedad chocó contra un edificio y luego se peleó con policías y periodistas que cubrían el hecho. El dato extra de la historia es que se trataría de un agente encubierto.

El accidente se produjo alrededor de las 8 de la mañana, cuando -por causas que aún se desconocen- el conductor perdió el control de su Peugeot 206 y colisionó contra la columna de un inmueble del barrio de Palermo. El vehículo quedó tan dañado que le impidió huir del lugar.

La policía logró detenerlo y luego de un par de horas pudo someterlo al control médico que reveló algo evidente: el automovilista prácticamente no tenía noción de sus actos porque registraba 2.75 de alcohol en sangre, casi seis veces más que lo permitido.

El dato clínico se corroboró rápidamente con las expresiones del protagonista de este episodio. «Me chocó un camión de basura, Macri es el culpable», aseguró a la prensa mientras efectivos de la Federal lo trasladaban a un patrullero. «Venía de trabajar, estaba a los tiros, me perseguían unos mexicanos», aseguró minutos más tarde.

La revelación que nadie esperaba fue captada por las cámaras de C5N y surgió de boca de un propio efectivo policial, quien, mientras trataba de convencer al conductor de que se quedara tranquilo para salir rápido del lugar, le dijo al oído, en tono cómplice: «Estamos tratando de sacar todas las filmaciones, es lo que me pidió tu jefe, Martinelli, el que te puso de encubierto». (Martinelli, podría ser el titular de la comisaria 15)

El efectivo, en su tarea de persuasión lo llamaba Marcelo; se pudo acreditar que automóvil esta radicado a nombre de Marcelo Rey Balmaceda.

Cuando estaba en el interior del patrullero, esta persona comenzó a insultar a los camarógrafos que lo grababan. Como no podía evitar que mostraran su imagen, empezó a hacer gestos con el dedo mayor y finalmente decidió bajarse los pantalones.

Tras discutir con los policías, a los que acusó de someterlo a una golpiza, el conductor bajó del patrullero y accedió a subir a una ambulancia del SAME. Recién ahí se recobró la tranquilidad. No manifestaba heridas, sin embargo, fue dirigido a centro de salud no precisado.

El resultado del test de alcoholemia indica que el automovilista tomó al menos el equivalente a unas 12 latas de cerveza. Sin embargo, la cantidad de bebida que ingirió podría haber sido mayor, dado que el examen se le realizó dos horas después del incidente. En ese estado, una persona puede sufrir deficiencia motora grave, estupor y pérdida de la conciencia y de la comprensión.

(fuente: infobae y C5N)