ES EL ARA-SAN JUAN!!!

En primera persona:

El sabor agridulce de la Argentina que no supimos construir

Me iba a dormir, en un viernes como cualquier otro… y tras una inexplicable, para mi, lágrima que corrió por mi mejilla necesité levantarme y volver a mi computadora.
Un mate amargo y la necesidad de un bizcocho dulce, explicaron lo que me estaba pasando.
Escuché al papá de Luis Niz: «estoy triste porque yo guardaba la esperanza que estuviera vivo» dijo cuando hablaba de su hijo Luis Alberto; que se estaba por casar y que «HOY tendría 28 años».
Otro papá, contenía a los familiares, celebraba comenzar a resolver el duelo…
El mundo nos ayudó: se dió el operativo de búsqueda más grande en la historia naval. La última tecnología puesta a disposición del mar argentino. A disposición de 44 argentinos y del desconcierto de 40 millones.
Datos técnicos, información oficial, eran ruidos en una especie de emoción y conmoción como no se creyó vivir.

Es el ARA SAN JUAN!!! reir o llorar… Se termina el escepticismo después de 22 frustrantes avisos en alta mar.
Toda la tarde, sonó como «ruido» informativo: se abandona la búsqueda… se van a Sudáfrica… mezclado con noticias de inflación, terrorismo, G20. Era algo más…
Ahora pensar, que las generaciones que vienen, van a tener 44 «soldados Cabral», 44 héroes en sus páginas de historia, que no serán (seguramente) del manual del alumno bonaerense, o del Kapelusz.
366 días de la «anomalía hidroacústica»: una frase nueva que nos marcó por siempre.
Sabremos alguna vez, qué pasó? Qué pasó con la reparación de media vida del ARA- SAN JUAN? Qué pasó en torno del submarino? Quienes recibieron el alerta? Se podrá creer en la investigación? Las baterías???!!!!!
Le podremos decir la verdad a las generaciones que vienen; esos que los tendrán como héroes.
Los protagonistas de esta época no tendremos esa respuesta; no se si vamos a creer en lo que nos digan!
Sólo pido, que los hijos de mis nietos lo sepan. Mi deseo es que esas generaciones valoren la sangre derramada y tengan la Argentina que no pudimos construir.

Condolencias a sus familiares. Argentina comparte vuestro dolor.